Esta fiesta tiene sus orígenes en una mezcla de mito y realidad,
que viene de la época en que los caballeros Templarios salvaron la ciudad
sitiada de Caravaca de la Cruz de los moros. Cuenta la leyenda que necesitado
agua para abastecerse, un grupo de Templarios atravesaron el sitio musulmán acaballo.
No habiendo encontrando agua, cargaron con vino en pellejos y a todo galope,
cruzaron de nuevo el sitio y entraron a la ciudad. Fueron recibidos con alegría y las mujeres les ofrecieron ramilletes y adornaron a los
caballeros y a sus caballos con bellos mantos bordados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario